La variación anual del índice general de precios suaviza su caída en el mes de febrero, con una reducción del 1,1% en España y del 0,8% en Cataluña, lo que implica que los precios han descendido a un ritmo menor que el mes pasado. Cabe destacar, que la bajada de los precios se ha moderado en casi todas las CCAA (salvo Canarias), y que la disminución del IPC en Cataluña ha sido de las menores en comparación con las otras CCAA.
Los grupos que han tenido una mayor influencia al alza han sido: transporte, cuyo aumento se explica por la subida de los precios de los carburantes y lubricantes; y alimentos y bebidas no alcohólicas, por el incremento del precio de las legumbres y hortalizas y de los aceites, así como por el hecho de que el precio de las frutas secas no ha bajado como lo hizo el año pasado.
Cabe destacar, que la inflación subyacente –índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos– se ha mantenido en el mismo nivel del mes anterior, con lo cual el precio de los componentes más estables de la cesta de la compra ha aumentado un 0,2% en términos anuales.
Si se analiza la variación mes a mes, de los doce grupos que conforman la cesta de la compra representativa para la elaboración del IPC, se han observado reducciones sólo dos de ellos: vestido y calzado y vivienda. En el resto de los grupos ha registrado un incremento de precios, llevando la variación mensual del IPC al 0,2%.
En este sentido, el índice de precios del grupo alimentos sin elaboración y productos energéticos ha registrado un repunte del 1,2% en términos mensuales, aunque en comparación con el mismo mes del 2014 la disminución ha sido del 6,3%. En particular, destaca el aumento del 1,4% de productos energéticos y del 4,1% de carburantes y combustibles de enero a febrero.
Finalmente, al considerar el indicador de inflación armonizado (IPCA) –que permite realizar una comparación con la evolución de los precios en la Eurozona– se aprecia que el diferencial de inflación con la Unión Monetaria continúa siendo negativo (-0,9 p.p.) ya que el IPCA en Europa ha descendido un 0,3% mientras que en España ha bajado un 1,2%, en términos anuales. Cabe señalar, que esta diferencia se ha mantenido estable en los últimos meses.
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