- Con carácter excepcional y siguiendo el camino de la Comisión Europea por no aplicar el Pacto de Estabilidad y Crecimiento.
- Los ayuntamientos y el resto de administraciones locales, no tendrían que endeudarse, puesto que el que harían es gastar (o ingresar menos) el que han ahorrado estos últimos años, para atender las nuevas necesidades derivadas de las secuelas del COVID-19 en sus municipios.
Foment del Treball pide que, ante la crisis económica que comporta la crisis sanitaria de la COVID-19, se hagan uso de los recursos disponibles y aparcados económicamente en los remanentes de las administraciones locales. Se trata de aceptar una medida excepcional en el mismo sentido que lo ha hecho la Comisión Europea de forma que se puedan destinar, sin restricción, todos los recursos disponibles a la política de reconstrucción a la cual también estàn gritadas a participar las administraciones locals.
No se entendería que, atendida las circumstancies y la magnitud de la crisis económica, estuvieran aparcados unos recursos públicos, resultado de superávits otros años, mientras nuestro país sufre tan intensamente una situación. Es por este motivo que es necesario que se apruebe con urgencia la eliminación de las actuales restricciones por el uso de los remanentes de las administraciones locales a gastos (o menos ingresos) y orientados a la política de reconstrucción ante el COVID-19.
Excepcionalidad
La aplicación de la ley de estabilidad presupuestaria a las administraciones locales, tal como esta actualmente definida, provoca que estas administraciones tengan de forma recurrente superávits, los cuales se van acumulando año tras año, aumentando progresivamente los recursos aparcados en los romanents.
Si inicialmente, con la gran crisis, había que enderezar las finanzas municipales, este hito ya se logró hace años, y ahora se dispone de volúmenes crecientes de recursos públicos a manos de los ayuntamientos, diputaciones y otros entes locales, que se encuentran aparcados, puesto que la normativa es excesivamente restrictiva con el uso que se puede hacer del remanente de los ejercieras anteriores.
Actualmente la Comisión Europea ha entendido que se daba una circunstancia excepcional con el COVID-19, cosa que permitiría el uso de la salvaguardia por no aplicar el Pacto de Estabilidad y Crecimiento, siempre que el mayor gasto o menor ingreso esté ligado al Covid-19. Este gasto puede ser gasto directo o con ayudas económicas y sociales, entre otros. Por lo tanto, parece que este mismo criterio habría que dar a las finanzas municipales, en nuestro país, y permitir esta excepcionalidad a la norma de estabilidad interna, la española, para hacer el que Europa hace con los Estados.
Adicionalmente, hay que señalar que, a diferencia de los Estados, los Ayuntamientos y el resto de administraciones locales, no tendrían que endeudarse, puesto que el que harían es gastar (o ingresar menos) para atender las nuevas necesidades derivadas de las secuelas del COVID-19 en sus municipios con el que han ahorrado estos últimos años, y así estimular la economía al conjunto del territorio nacional, puesto que la suya de gasto se hería en todos el municipios en función del que hubieran ahorrado EN Los últimos años, siente lluvia fina en todo el país.
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