- Foment del Treball ha acogido esta mañana un webinar en el que destacados actores del sector como el Port de Barcelona, Marina Port Vell, MB92 y Barcelona Clúster Náutico, han puesto en valor la contribución presente y futura de este sector con una estrategia común basada en la sostenibilidad, la innovación y la integración a la ciudad
- La Economía Azul aporta un valor añadido bruto a toda la Unión Europea de 218.000 millones de euros, 23.636 de los cuales pertenecen a España y 7.300 se generan desde Catalunya
- El sector náutico, a pesar de la complicada situación derivada de la Covid, ha mantenido su actividad. Actualmente, y totalmente alineado con el Plan Estratégico del Port de Barcelona y con las políticas ESG de la Comisión Europea, pone el foco en la recuperación sostenible
- Dentro del sector náutico, el segmento de los superyates emerge como un potenciador del turismo seguro y de alto valor añadido. El Port de Barcelona es uno de los pocos puertos del Mediterráneo especializado en ofrecer servicios a superyates de calidad y con capacidad para recibir embarcaciones de hasta 180 metros de eslora
Foment del Treball ha acogido esta mañana la celebración del webinar ‘Barcelona, hub marítimo y náutico del Mediterráneo. Oportunidad para la recuperación económica de Barcelona y su entorno’. El presidente de Foment del Treball, Josep Sánchez Llibre, ha presentado la jornada y el vicepresidente de la institución, Joaquim Llansó, ha moderado una mesa redonda en la que relevantes actores del sector marítimo y náutico han puesto en valor la contribución presente y futura que aporta el sector a la ciudad y su entorno, y han posicionado a la industria marítima y náutica de Barcelona como uno de los ejes impulsores de la recuperación social y económica provocada por la pandemia de la Covid-19. En el debate, han participado la presidenta del Port de Barcelona, Mercè Conesa; el director general de Marina Port Vell, Ignacio Erroz; el director financiero de MB92, Antonio Cirera; y el director general de Barcelona Clúster Nàutic, Andor Serra. El cierre del acto ha sido a cargo del ilustrísimo teniente de alcaldía del Ayuntamiento de Barcelona, Jaume Collboni.
En su presentación, el presidente de Foment del Treball, Josep Sánchez Llibre, ha querido destacar que “ante el futuro económico incierto que tenemos actualmente, hemos de buscar sinergias y oportunidades en sectores tan relevantes como representa, desde el punto de vista económico, todo el engranaje del Port de Barcelona. Debemos tener en cuenta estas cuestiones vinculadas a la náutica de Barcelona para poder ofrecer una valoración optimista de la economía”. Por parte de Foment del Treball, ha añadido, «continuaremos buscando el máximo de facilidades para hacer la vida más fácil a las empresas, intentando influir en la Administración sobre sus necesidades”.
El Mediterráneo, eje de la recuperación en Europa
Ante la complicada situación que ha provocado la pandemia de la Covid-19, la Economía Azul constituye uno de los pilares para la recuperación de los países de la Unión Europea y, en conjunto, se convierte en un activo estratégico imprescindible para la regeneración económica del Mediterráneo. Según el informe ‘The EU Blue Economy Report’ elaborado por la Comisión Europea, la Economía Azul supone un importante efecto tractor y aporta un valor añadido bruto a toda la Unión Europea de 218.000 millones de euros, 23.636 de los cuales pertenecen a España y 7.300 se generan en Cataluña. De la misma forma, en Cataluña, las actividades ligadas a este sector generan más de 214.000 puestos de trabajo y solo en Barcelona ocupan a 15.000 personas representando un 4,3% del PIB de la ciudad, según datos aportados por Barcelona Clúster Nàutic.
El Port de Barcelona es, a través de su músculo empresarial y de su actividad, uno de los primeros puertos del Mediterráneo y se ha preparado para hacer frente a la recuperación económica y social con un Plan Estratégico con horizonte 2025 que fija sus actividades de futuro enfocadas claramente hacia la sostenibilidad desde tres puntos de vista: social, medioambiental y económico. Un hecho que se refleja en los diferentes proyectos que contiene este plan: la creación de un entorno sostenible, el refuerzo de un modelo de gestión integrador e impulsor de la singularidad del espacio, y la dinamización económica, aspecto, este último, clave en un momento de reconstrucción social y económica. En este sentido, la presidenta del Port de Barcelona, Mercè Conesa, ha querido destacar que “tenemos la oportunidad de generar una renovación del espacio puerto-ciudad. Debemos poner en valor este espacio, la innovación que nos puede aportar. Desde el Port, el futuro después de la Covid pasa por la diversificación y el impulso de la Economía Azul”, y ha puesto el acento en que “debemos tener una infraestructura preparada, tener claro que estamos en transición ecológica, en proceso de digitalización y tecnificación. Vamos a posicionar el Port de Barcelona en la Champions League dels Ports”.
El náutico, un sector resiliente y enfocado a la sostenibilidad y a la innovación
El sector náutico ha mostrado su resiliencia durante toda la crisis socioeconómica generada por la devastadora crisis sanitaria de la Covid. Aun así, el sector ha mantenido su actividad adaptándose a la nueva situación. Ahora, después de más de un año de pandemia, la industria náutica catalana, que cuenta con 1.175 empresas, que generan alrededor de 10.000 puestos de trabajo directos e indirectos y un impacto económico de 84 millones de euros anuales en Cataluña, está preparada para salir de la crisis. En este sentido, desde Barcelona Clúster Nàutic están convencidos de que el sector es un fuerte impulsor y remolcador de la Economía Azul y que a través de la creación de sinergias entre los diferentes actores públicos y privados puede acontecer uno de los ejes que impulse la recuperación económica de la ciudad y su entorno. En este sentido, el director general de Barcelona Clúster Nàutic, Andor Serra, ha explicado que “sector náutico en Barcelona, puede y tiene que crecer más. Más turismo náutico, más ofrecida de chárteres, más transeúntes, pero también hacen falta más soluciones sostenibles, desarrollar elementos de cero emisiones, electrificación, suministros híbridos, y con las empresas que actualmente trabajan en Barcelona tenemos la oportunidad y la obligación de reactivar el sector.»
Los superyates, un segmento contributivo, en crecimiento y potenciador de un turismo seguro y de alto valor añadido
Dentro de la náutica, el Puerto de Barcelona, a través de la infraestructura de Marina Port Vell y de MB92, es uno de los pocos puertos del Mediterráneo que se ha especializado en la prestación de servicios de calidad para superiots que llegan a la costa catalana desde cualquier lugar del mundo. La actividad de estas dos empresas ha ido creciendo durante la última década. A Marina Port Vell, por ejemplo, en 2015, se recibieron 317 escalas de superyates y, al 2019, en época prepandemia ya fueron 695. En cuatro años la actividad se duplicó. Otra de las ventajas competitivas de las marinas especializadas en este segmento, como la del Port de Barcelona, es la capacidad de atraer un turismo de calidad y seguro. En este sentido, la Unión Europea ha marcado una estrategia de turismo sostenible con la que Marina Port Vell está completamente alineada. Ignacio Erroz, director de la Marina Port Vell, ha incidido en la necesidad de potenciar este turismo seguro para reactivar el sector y contribuir en la ciudad y a su entorno, y ha añadido, también, la importancia de potenciar un turismo de calidad. «Desde Marina Port Vell generamos un turismo de alto valor añadido para la ciudad. Nuestros visitantes pueden llegar a la ciudad por placer y no solo visitan Barcelona, sino que aprovechan para disfrutar de la costa catalana. Pero también atraemos un visitante en la ciudad que puede llegar por negocios o para disfrutar de grandes acontecimientos, como por ejemplo la Fórmula 1 o lo Mobile World Congress. Concretamente, a la última edición prepandemia del Mobile, acogimos hasta 10 superyates que recalaron en Barcelona para asistir al acontecimiento. Este año, ya tenemos peticiones de prerreserva hechas».
Pero la actividad que produce el segmento de los superyates no solo impacta en un turismo de alto valor añadido para la ciudad y su entorno. Acoger este tipo de embarcaciones, de gran eslora, supone un retorno económico muy importante para Barcelona derivado de los gastos de estas embarcaciones. Según datos de Barcelona Clúster Nàutic, un superyate de 55 metros de eslora puede producir unos gastos anuales alrededor de 3 millones de euros. Barcelona tiene una oportunidad real de continuar apostando por este sector y un margen de crecimiento amplio dado que en los próximos años la flota de este tipo de embarcaciones crecerá porque actualmente hay en construcción unas 300 nuevas unidades de más de 30 metros de eslora que pueden llegar a Barcelona desde cualquier lugar del mundo. «Uno de los caminos para reactivar la economía desde el hub náutico de Barcelona es fortalecer la formación local para poder cubrir los puestos de trabajo especializados que se requieren en esta industria y que, a día de hoy, todavía se cubren mayoritariamente con empresas con sede en el extranjero. Con un equipo de más de 800 trabajadores, a MB92 damos servicio a una media de 100 superyates en el año que requieren de técnicos y profesionales de alto conocimiento. Es necesario potenciar sinergias y colaboraciones que nos permitan innovar y crear valor verso la economía del futuro, que tiene que crecer siente de color azul y sobre todo sostenible. » finaliza Antonio Cirera, director financiero de MB92
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