Los últimos datos del mercado de trabajo ponen de manifiesto una desaceleración progresiva en el ritmo de recuperación del empleo. Las altas tasas de desempleo y una posible ralentización en el crecimiento económico obligan a no adoptar medidas que puedan conllevar incrementos de costes laborales o nuevas obligaciones o rigideces en nuestro mercado laboral para facilitar nuevas contrataciones. Según los datos del paro registrado del mes de septiembre, en Cataluña el paro ha disminuido en 374 personas (-0,10%), y la cifra total de parados se sitúa en 380.344 personas. Interanualmente, se ha producido una reducción del -5% (-20.029 parados menos) respecto septiembre de 2017.
Evolución tasa de paro 2007-2018
Fuente: Elaboración propia a partir de los datos del INE.
La Encuesta de Población Activa del 2º Trimestre de 2018 situó la tasa de paro en Cataluña en un 11,4% (0,8 puntos menos que el trimestre anterior, que fue del 12,19%), situándose en valores del cuarto trimestre de 2008, siendo el número total de parados de 432.000 personas. Los datos expuestos por el INE, suponen un descenso del número de parados en 26.700 personas respecto al trimestre anterior (-5,8%), y en relación con el mismo trimestre del año 2017, ha habido un descenso de 65.500 parados (-13,1%). Asimismo, el número de ocupados ha aumentado en 57.200 personas (1,7%) respecto al trimestre anterior y en 89.900 personas respecto al año anterior (2,7%).
Fuente: Elaboración propia a partir de los datos del INE.
En septiembre de 2018 se han formalizado en Cataluña 279.205 contratos laborales, de los cuales el 16,24% fueron indefinidos (45.340) y el 83,76%, temporales (233.865). Respecto del mes de agosto, la contratación ha incrementado un 19,92% (46.378 contratos más), siendo más intenso el aumento de la indefinida (66,67%; 18.137 contratos más) que el de la temporal (13,73 %; 28.241 más).
Interanualmente, se ha producido un descenso del -4,53% (-13.256 contratos menos), a pesar del aumento de la contratación indefinida (7,30%) para la reducción de la contratación temporal (-6,53%; 16.340 contratos menos). La contratación acumulada de enero a septiembre de 2018 se ha incrementado un 3,8% (90.127 contratos más), gracias al aumento de la contratación indefinida (11,6%), que mantiene el ritmo, y un crecimiento más suave de la temporal (2,6%).
Flexibilidad
En este contexto, no se puede bajar la guardia y conviene adoptar nuevas medidas que impulsen la creación de empleo por parte de las empresas en términos de reducción de costes, flexibilización de las relaciones laborales y más seguridad jurídica en la aplicación de la normativa vigente, siendo el diálogo y la concertación social los instrumentos sobre los que construir las reformas necesarias
Según los datos de la Encuesta Anual Laboral, del Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, sólo un 27,5% de las empresas en Cataluña (el 27,2% al nivel estatal) aplicaron medidas de flexibilidad interna en 2016, último dato disponible.
A nivel estatal, el porcentaje de empresas que han aplicado medidas de flexibilidad interna es mayor cuanto mayor es la dimensión de la empresa: desde el 24,58% en las empresas de 5 a 9 trabajadores, hasta llegar al 54,3 % en las empresas de más de 499 trabajadores. Por sector de actividad, se han aplicado medidas de flexibilidad interna en un 29,5% de las empresas del sector servicios, en un 22,3% en la industria y en un 19,3% de las empresas de la construcción.
En Cataluña, de las diferentes medidas de flexibilidad interna analizadas, un 16,5% del total de empresas aplicaron medidas que afectaban a cambios de contrato según tipo de jornada en el trabajo, un 12,4% a la jornada laboral, un 3,9% al sistema de remuneración y cuantía salarial, un 2,5% en la movilidad funcional y un 1,7% en la movilidad geográfica.
Fuente: Elaboración propia a partir de los datos del Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social
Es por ello, que en el último Acord Interprofessional de Catalunya (AIC) 2018-2020 firmado por las organizaciones empresariales y sindicales más representativas en Cataluña el pasado mes de julio, la flexibilidad en el tiempo de trabajo y las medidas de gestión del mismo han tenido un papel fundamental tanto en las negociaciones como en los acuerdos alcanzados en la materia, introduciéndose mejoras en la gestión negociada de la flexibilidad que combine la flexibilidad necesaria que requieren las empresas con una protección adecuada de los derechos de las personas trabajadoras.
Asimismo, la negociación colectiva implica una constante comunicación entre empresas y representantes de los trabajadores, por lo tanto, esto implica tomar en consideración la misma como un elemento dinámico, y con capacidad de adaptabilidad a las diferentes circunstancias y contextos. No podemos obviar que cuando hablamos de racionalización de los horarios, usos del tiempo, etc. debemos tener en cuenta en primer lugar que las necesidades de los trabajadores cambian a lo largo de la vida, y en segundo lugar que las necesidades de cada sector son divergentes y cambiantes, así como, que dentro del propio sector las realidades de las empresas pueden ser muy diferentes.
Las partes firmantes del Acuerdo Interprofesional de Cataluña determinamos que la regulación de las cuestiones relacionadas con el tiempo de trabajo debe combinar la flexibilidad en la distribución del tiempo de trabajo con una protección adecuada de los derechos de las personas trabajadoras y una mayor estabilidad en el empleo. Pe tanto, la negociación colectiva debe regular la organización flexible del tiempo de trabajo en relación con las necesidades de la actividad empresarial, especialmente, en ciclos de diferente intensidad de la actividad y fluctuaciones en la demanda.
Los convenios colectivos establecerán el cómputo anual de la jornada y su distribución irregular a efectos de contribuir a racionalizar la gestión del tiempo de trabajo, así como, la flexibilidad del tiempo de trabajo, mejorando la eficiencia en la actividad productiva y en la prestación de servicios, e incrementando la productividad del trabajo.
Sin embargo, a la vez de aplicar las diferentes medidas o instrumentos que deberían ser tenidos en cuenta para la negociación colectiva, no puede obviarse que cada sector y cada empresa, en función de parámetros como pueden ser la actividad sectorial, la su dimensión, situación coyuntural, o su relación con el exterior, por ejemplo, son diferentes, y por tanto, deben deben tener un tratamiento diferenciado y adaptado a su realidad. No se pueden hacer jornadas u horarios de manera uniforme, sino que tiene mucho que ver con la situación de cada sector y de cada empresa.
Desconnexión laboral
El futuro del trabajo ha cambiado con rapidez como consecuencia del desarrollo de la tecnología digital y la globalización, además de otros cambios fundamentales en la organización del trabajo. La conjunción de estos diferentes factores supone un cambio de paradigma del mercado laboral, y si bien las nuevas tecnologías han permitido una mayor flexibilidad en las relaciones laborales también pueden suponer una conexión continua del trabajador en la prestación de servicios, y por tanto, una afectación a la conciliación de la vida laboral, familiar y personal y riesgos para la salud de las personas. Por lo tanto, es necesario encontrar el necesario equilibrio entre el beneficio en el uso de las nuevas tecnologías y el derecho a la conciliación.
Según el Análisis Randstad “Desconectar en vacaciones” del año 2018:
- El 77,8% de los trabajadores asegura que consigue evadirse del trabajo durante sus vacaciones, lo que supone un aumento de 10,3 puntos porcentuales respecto a la cifra alcanzada en 2017.
- Por tramos de edad, destaca que a menor edad, mayor es la dificultad para desconectar del trabajo. En particular, los menores de 25 años son los que muestran un mayor ratio de ocupados que no consigue desconectar, con un 30,8%. Le siguen los que tienen entre 25 y 45 años (23%) y, finalmente, los mayores de 45 años (15,4%).
- La dificultad para desvincularse de las cuestiones laborales y el contacto con la empresa son las principales razones por las que los profesionales no pueden desconectarse de su trabajo.
- Uno de cada cuatro profesionales (25,6%) sólo necesita un día de vacaciones para desvincularse del trabajo.
Fuente: Elaboración propia a partir de los datos de’l’anàlisi Randstad «Desconectar en vacaciones» 2018
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