La difícil situación derivada del episodio de sequía que está sufriendo Cataluña, es especialmente preocupante por el sector vitivinícola del Penedès, ya que coincide con varios años marcados por la falta de producción y supone un grave riesgo para la continuidad y viabilidad económica de muchas explotaciones y empresas de la zona.
El Instituto Agrícola, como asociación empresarial representativa y conocedora de las problemáticas del sector, se pone al servicio del Departamento de Acción Climática y Agenda Rural (DACAAR) para trabajar e impulsar una serie de medidas de urgencia para hacer menos graves las afectaciones de la sequía en el sector vitivinícola y garantizar su supervivencia. Por eso, pedimos un encuentro inmediato con el conseller para tratar la problemática que afecta a la industria vinícola del Penedès con casi 3000 viticultores afectados de más de 160 bodegas con una superficie de más de 25.500 hectáreas.
El Instituto Agrícola considera que es necesario proteger la industria vitivinícola del Penedès, que es la mitad del sector en Catalunya, ante una sequía que se irá agravando y que pone en peligro la producción de más de 20 millones de litros y que puede afectar a ocupación de un colectivo superior a las 10.000 personas. Por eso, pedimos:
- Habilitación urgente de las ayudas de la sequía correspondientes a la campaña anterior
- Simplificación de los procedimientos de solicitud y cobro, de forma que se habilite un pago automático asociado a todos los libradores de vendimia.
- Simplificación administrativa real de los procedimientos de solicitud de las ayudas de contrato global de explotación de Competitividad y Diversificación Agraria, equiparándolas en documentación a la ayuda de mitigación de cambio climático.
- En previsión del probable aumento de la mortalidad de las cepas de muchas explotaciones, pedimos una ayuda extraordinaria a la replantación de fallas para los próximos ejercicios o, en todo caso, habilitar esta posibilidad en el marco de los planes de reestructuración del viñedo sin incorporar superficie mínima.
- Establecimiento de líneas de liquidez y aval a través del Instituto Catalán de Finanzas y entidades financieras con convenio para las empresas vitivinícolas afectadas por la disminución tanto de la producción como de la entrada de uva.
- Mantenimiento del riego puntual de supervivencia como salvaguarda de las plantaciones existentes a través de cubas procedentes de pozos habilitados a tal efecto y que no influyan con el abastecimiento local de la población.
- Mediante una simplificación del procedimiento administrativo y una financiación específica, el DACAAR y la Agencia Catalana del Agua (ACA) deberían implantar mecanismos para facilitar la apertura de pozos (individuales o mancomunados) orientados a paliar la situación de sequía extrema y permitir la supervivencia del sector vitivinícola del Penedès .
- Además, para facilitar la apertura de pozos, pero también con el objetivo de encarar situaciones de sequía extrema en el conjunto del territorio, debería utilizarse la información disponible por parte de la ACA y el Instituto Geológico y Cartográfico de Cataluña, e, igualmente, con carácter de urgencia y con visión de futuro, deberían realizarse estudios y autorizar el despliegue de infraestructuras para el aprovechamiento de aguas regeneradas u otros recursos hídricos válidos para el cultivo del viñedo.
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