Foment del Treball manifiesta su decepción por las propuestas contenidas en el Libro Blanco para la Reforma Tributaria

• Foment expresa su temor de que el informe de los expertos sea una excusa para subir impuestos y muestra su desacuerdo.
• La no eliminación del Impuesto de Patrimonio es una estrategia para hacer una LOAPA en materia tributaria a las CCAA.
• Cada día que pasa es más urgente una profunda reforma de la administración pública para ganar eficiencia y evitar duplicidades. No se puede estar constantemente pidiendo esfuerzos a la sociedad sin antes evaluar la eficiencia del gasto público.
• Foment destaca que las propuestas fiscales recogidas en su Libro Verde son más acordes a la realidad económica de España.

Foment del Treball manifiesta su decepción por las propuestas contenidas en el Libro Blanco para la Reforma Tributaria, entregado ayer al Ministerio de Hacienda del Gobierno de España. Sin perjuicio de la debida consideración a la alta cualificación de los integrantes del Comité de personas expertas que lo ha elaborado, y siendo consciente de la finalidad expresa y límites fijados en el encargo realizado al Comité por la ministra de Hacienda, Foment del Treball debe expresar su desacuerdo con muchas de las propuestas realizadas en el mismo.

Es claramente inconsistente:

• Apoyar la armonización y coordinación fiscal en el ámbito tributario y mantener el Impuesto sobre el Patrimonio, inexistente en el resto de los países de la Unión Europea. Incluso el propio Libro Blanco reconoce que la supresión del Impuesto de Patrimonio y el Impuesto de Sucesiones y Donaciones “es posible”. La existencia de una imposición patrimonial penaliza el ahorro, especialmente grave en períodos impositivos con tipos de interés bajos, y puede llegar a ser confiscatorio, implica el encarecimiento del coste de capital de las empresas, y su consiguiente penalización sobre la inversión, la productividad, y el crecimiento económico.
• Reconocer la autonomía fiscal de las Comunidades Autónomas, y proponer el establecimiento de límites mínimos y máximos para “armonizarla”. Foment del Treball considera que la no eliminación del Impuesto de Patrimonio es una estrategia para hacer una LOAPA en materia tributaria a las CCAA.
• Abogar por la eliminación de la tributación conjunta, lo cual supone un desconocimiento de que la capacidad económica corresponde a la unidad familiar (como se reconoce en el Libro Blanco cuando se habla de “capacidad económica de los hogares”), y no a sus sujetos individuales; resulta contraria a la equidad horizontal; y solo paree justificarse en el cumplimiento del previo mandato gubernamental.

Foment del Treball muestra también su disconformidad con algunos de los fundamentos del informe por su clara incoherencia.

La clara opción ideológica que realiza en favor de incrementar aún más la progresividad del sistema tributario, fundamentándolo en el artículo 31 de la Constitución, contrasta con el ominoso silencio sobre el mandato de ese mismo precepto constitucional de que el gasto público debe responder a los criterios de eficacia y economía.

El sistema tributario propuesto no va dirigido a impulsar el crecimiento económico, la economía productiva y la creación de puestos de trabajo. Estos condicionantes económicos sólo se tienen en cuenta para solicitar que no se aplique de forma inmediata, y que se espere a que la economía española se haya recuperado de los efectos de la crisis del 2008 y de la COVID. Lo que supone el reconocimiento de que la propuesta es claramente antieconómica y va dirigida a que quienes ya pagan paguen más. Las empresas y las familias no pueden soportar más presión fiscal.

Su punto de partida, como se afirma en la primera línea de su resumen ejecutivo, es el siguiente: “Cualquier sistema tributario debe ir de la mano de las necesidades de gasto público expresadas por los ciudadanos a través de las instituciones democráticas”. Ese principio, que no es objeto de matización en el Libro Blanco, pone de manifiesto la exclusiva finalidad recaudatoria de las propuestas y dibuja un sistema tributario que puede acabar comprometiendo la economía del país. Por ello, Foment expresa su temor de que el informe de los expertos sea una excusa para subir impuestos y muestra su desacuerdo.

Por contra, Foment quiere resaltar algunos elementos valiosos aportados en el Libro Blanco, sobre todo para el análisis, y algunos también en el ámbito de las propuestas, como el reconocimiento de un amplio porcentaje de economía sumergida que degrada las bases tributarias, y que explica que la tributación en España sobre el PIB esté teóricamente por debajo de la media europea. La necesidad de seguridad jurídica (con la propuesta de reducción del plazo de contestación a las consultas tributarias), así como la necesidad de mejora de las relaciones entre la AEAT y el contribuyente, incentivando las actas con acuerdo y los medios alternativos de solución de conflictos.

En este sentido, Foment insiste en que cada día que pasa es más urgente una profunda reforma de la administración pública para ganar eficiencia y evitar duplicidades. No se puede estar constantemente pidiendo esfuerzos a la sociedad sin antes evaluar la eficiencia del gasto público.